Los graduados egresaron de 47 instituciones educativas del Distrito.
Los jóvenes que egresan de las instituciones educativas del Distrito están preparados para afrontar los desafíos del mundo laboral desde que terminan el colegio, muestra de ello son los 1.370 nuevos graduados del proyecto de fortalecimiento y continuidad de doble titulación.
De la mano de la Institución Universitaria de Barranquilla -IUB- y la secretaría de Educación del Distrito, estos jóvenes recibieron la certificación de técnicos laborales por competencias, lo cual los dota de herramientas para aspirar y lograr una pronta inserción al mundo laboral, mientras siguen construyendo su proyecto de vida.
Los estudiantes, provenientes de 47 instituciones educativas oficiales del Distrito, son el resultado de la formación que se da bajo el modelo IUB o Proyecto para el Fortalecimiento y Continuidad de la Doble Titulación.
Este programa se implementa mediante una estructura curricular articulada que integra el nivel de educación media y la formación en la educación superior para optimizar la calidad de la formación y la duración de los estudios.
¿Cómo se logra la doble titulación?
De manera conjunta con las instituciones de educación distritales, la Institución Universitaria de Barranquilla -IUB- ha trabajado para el desarrollo de competencias básicas, ciudadanas y laborales generales y específicas en los jóvenes de los grados 10º y 11º de la educación media.
Al cumplir este proceso los egresados reciben la doble titulación, una como bachiller y otra como técnico laboral, asimismo la oportunidad de continuar su formación profesional en la IUB, mediante la homologación de la formación, lo que reduce la duración en el siguiente nivel de estudios.
La administración del alcalde Jaime Pumarejo le ha apostado a robustecer las estrategias y programas que brinden a los jóvenes oportunidades para construir, desarrollar y consolidar proyectos personales y profesionales gracias a itinerarios de formación a lo largo de la vida.
Con esta estrategia también se pretende asegurar la calidad, pertinencia y eficiencia de la educación, al desarrollar programas que forman en los jóvenes las competencias definidas por el contexto social y productivo, de modo tal que el acceso al mercado laboral sea más efectivo.