Miembros de una misma familia dedicados durante más de 10 años al mictrotráfico.
Entre biblias, veladoras, una figura de la india Tibisay y otros elementos de santería, fue hallada toda la evidencia con la que la policía Metropolitana de Barranquilla desarticuló, en las últimas horas, el grupo delincuencial organizado ‘La familia’.
Cinco miembros de una misma familia, tres hermanos y dos hijos, dedicados al tráfico de estupefacientes durante más de 10 años, fueron capturados por las autoridades por los delitos de concierto para delinquir, tráfico, porte de estupefacientes y destinación ilícita de inmueble.
Tras varios meses de trabajo de inteligencia por parte de la Unidad de Intervención Policial (Unipol), se recopiló toda la información que permitió, con las órdenes correspondientes, allanar las tres viviendas implicadas en las actividades ilícitas, una de ellas en uno de los bolsillos del barrio Rebolo, en el sur de la ciudad.
“En estos allanamientos se encuentra un altar, es claro que practicaban la santería, al preguntársele a estas personas el motivo de estos elementos, simplemente manifiestan que era lo que ellos hacían para protegerse de las autoridades”, afirmó el general Diego Hernán Rosero, comandante de la Policía Metropolitana de Barranquilla.
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Durante los allanamientos se encontraron 20 cigarrillos de marihuana, 2 agendas en las que llevaban el control de las ventas diarias de estupefacientes y elementos de santería con los que, al parecer, para no ser detectados por las autoridades, mientras se dedicaban a estas actividades.
De acuerdo con fuentes vinculadas a esta investigación, los presuntos delincuentes generaban una renta semanal de aproximadamente $6 millones, producto de la venta de estupefacientes en sectores del sur de la ciudad.